Pacientes con enfermedades catastróficas denuncian que citas médicas demoran hasta 45 días
Pacientes con enfermedades raras, huérfanas, catastróficas, trasplantados, pediátricos y con cáncer, se concentraron este miércoles frente a hospitales emblemáticos de Quito, Guayaquil y Cuenca para exigir al Gobierno medicinas, mayor transparencia en el sistema público de salud y celeridad.
Frente al Hospital Andrade Marín de Quito se dieron cita unas 60 personas, entre familiares, enfermos y personas con discapacidad, para pedir de forma urgente medicinas, dado que aseguran que hay desabastecimiento, además de la inclusión de nuevos medicamentos entre los subvencionados por el Estado.
"Lo primero es la entrega inmediata de medicamentos, no puede estar un paciente con enfermedades raras o huérfanas hasta 10 meses esperando", manifestó Gustavo Dávila, coordinador nacional de la Alianza Nacional por la Salud (ANS), que reúne 32 organizaciones que representan a pacientes con diversas enfermedades.
La Alianza solicita con estos plantones diálogo efectivo entre el sector público y las farmacéuticas y asociaciones de pacientes, al objeto de llegar a soluciones inmediatas que incluyan la adquisición urgente y transparente de medicamentos de calidad, y una mayor coordinación por parte del Instituto Ecuatoriano de la Seguridad Social (IESS) y la red pública integral de salud.
"El paciente es el centro del sistema de salud y debe tener presencia en las mesas de diálogo y recibir toda atención y ayuda del Estado", añadió Dávila antes de pedir "respeto y también que se elimine la corrupción en el sistema de salud".
En los plantones convocados en las tres principales ciudades de Ecuador también participó el Observatorio de Lucha contra el Cáncer, aparte de pacientes que caminaban con bombonas de oxígeno y familiares de ingresados en terapia intensiva.
Jennifer Verdesoto, de 24 años y con inmunodeficiencia primaria explicó que lleva tres meses sin medicación, cuando debe recibirla cada dos, debido a que en Quito no disponen de ella, ni de reactivos para poder ofrecer un diagnóstico certero sobre su enfermedad por la que suele tener las defensas bajas.
"Deberían colocarme (la medicina) en el hospital en Quito, pero como no hay diagnóstico no me la colocan. En Cuenca sí se dan y brindan estas oportunidades, hay reactivos y más inmunólogos pero no puedo viajar a Cuenca cada mes", se quejó la joven quiteña.
Por esta razón pidió que se incluya la gamaglobulina en la lista de medicamentos subvencionados, "porque hay pacientes como yo, que aparentemente no necesitamos, pero tenemos infecciones recurrentes", sostuvo.
La ANS denuncia un problema de desabastecimiento de medicamentos desde el Gobierno anterior, y pese a varias reuniones y compromisos adquiridos, desde hace 6 meses los pacientes no han visto avances, ni medicinas, reactivos o insumos para procedimientos médicos, mientras que las citas médicas superan los 45 días.
Patricia Rentería se sumó al plantón en Quito para exigir el abastecimiento de medicinas, después de que su esposo de 68 años sufriera un accidente por el que se encuentra en terapia intensiva desde hace más de un mes, y tuviera que poner de su bolsillo 144 dólares para salvarle de una infección de pulmón.
"Apelo a la sensibilidad de nuestro Gobierno porque ya es hora de que se preocupe de las personas que están agonizando porque no hay medicinas", lamentó.