Ómicron desplazó a Delta y ahora es la variante de dominio en Ecuador
La variante Ómicron del coronavirus se convirtió en la dominante en el país y desplazó a la Delta. Así lo anunció la ministra de Salud, Ximena Garzón, este viernes 7 de enero del 2022.
Hasta el pasado 3 de enero, y desde julio del 2021, la variante Delta fue la dominante en Ecuador con 1 256 casos. Otras variantes que circulan en el país son la Mu, con 542; Lota, con 353; Gamma, con 345; Lambda, con 304; Alpha, con 266; y otras, 218.
Sin embargo, la situación cambió. Las autoridades ya venían alertando de un incremento de contagios con un promedio semanal de 9 796 de casos, hasta esa misma fecha.
Solo en diciembre del 2021, se registraron más de 21 700 casos, frente a más de 9 100 en noviembre y 6 600 en octubre y esta tendencia se mantendrá al menos hasta el 15 de enero, según dijo la ministra Garzón.
Para el doctor Alberto Narváez, docente de la Facultad de Medicina de la Universidad Central, el país vive un pico de contagios similar al de mayo del 2021 y probablemente se alcance el pico máximo a finales de enerocuando se llegue a 6 000 casos promedio por día.
¿Qué significa que la variante Ómicron sea dominante?
César Paz y Miño, médico genetista y Biólogo en Genética Molecular, explica que la variante Ómicron se ha ido adaptando mejor a las circunstancias de infección y por eso ahora es dominante.
Señala que “como es más infecciosa, infecta a más personas rápidamente y reemplaza a la otra variante que era la dominante. Ómicron reemplaza por mejor adaptación biológica a la Delta”, agrega.
¿Por qué se adapta mejor Ómicron?
Esta mejor adaptación, indica el especialista, se debe a las más de 50 mutaciones que tiene esta nueva variante y, al menos 26 de ellas se localizan en la proteína S o Spike, que se la conoce como la llave de entrada a la célula humana.
Paz y Miño señala que por esas mutaciones es más fácil que se pegue e ingrese a las células por lo que tiene más probabilidad de sobrevivir.
Además, Ómicron necesita mucho menos tiempo para contagiar. Por ejemplo, dice el galeno, con la Delta se hablaba de que una persona en un lugar cerrado podía estar unos 15 minutos y no contagiarse, pero ahora puede contagiarse en uno o dos minutos.
Por ello, resalta Paz y Miño, el uso de la mascarilla es fundamental. Estudios han demostrado que su uso reduce la probabilidad de contagio.
Para el especialista, el riesgo de que esta variante sea dominante radica en que por el número de infectados se podría saturar el sistema sanitario y, aunque Ómicron no tiene las mismas características de gravedad, no quiere decir que no exista.
Alerta que las personas con enfermedades base como diabetes, obesidad, enfermedades pulmonares crónicas, renales o hipertensión son más vulnerables a esta variante y agrega que en el Ecuador esas patologías son de alta frecuencia. “Estas personas pueden desarrollar una enfermedad grave”, indica