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Hoy dos nombres encabezan las tendencias de twitter: María Paula Romo y Ola Bini. Buen momento para recordar de qué se trata este caso y por qué importa.
Como Ministra de Gobierno, Romo se dedicó a “ponerle el cascabel al gato”, ni sus peores enemigos pueden negarlo. Fue lo que hizo cuando en la rueda de prensa en la que se explicaban los detalles del retiro del asilo de Julian Assange, Romo alertó que el país se preparaba para ciber ataques como consecuencia de la decisión del gobierno. Añadió también que varios operadores de Wikileaks se encontraban operando desde el Ecuador por años y con total impunidad.
Horas después la Policía Nacional recibió una llamada en la que alertaba sobre la salida del país del ciudadano sueco Ola Bini, radicado en el Ecuador gracias a una visa tramitada directamente por el equipo de Ricardo Patiño y que había visitado a Assange en la Embajada del Ecuador en Londres en al menos 12 ocasiones distintas. Según la llamada, Bini huía del país llevando consigo información sensible robada por Wikileaks y que pretendían proteger ante el inminente arresto de Assange en Londres.
Ola Bini, nacido en la ciudad sueca de Gottemburgo, vivía en Ecuador desde el 2013 y desde aquí se movilizaba por el mundo. Su último viaje fue a Venezuela y el destino de su pasaje cuando fue detenido en el aeropuerto de Quito era Japón. Unos meses antes había recibido la visita del alemán Müller-Maguhn, considerado por EE.UU. un personaje clave en la interferencia de WikiLeaks en las elecciones presidenciales del 2016.
Con miles de giga bytes de información en distintos dispositivos (algunos incluso a manera de collar colgados de su cuello) fue arrestado y así se inició un proceso penal que duraría más o menos cuatro años. Fiscalía y sus especialistas no lograron des encriptar la cantidad de información en poder de Bini así que es imposible verificar qué información poseía, cuál era su origen o cuál el destino que pretendía darle. La investigación permitió encontrar pruebas de un supuesto acceso no consentido (hackeo) a un servidor de CNT. Fiscalía construyó su caso alrededor de esta prueba, formuló cargos y lo llevó a juicio.
Como Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo dijo sobre Wikileaks: "Assange y sus semejantes hacen causa común con los dictadores de hoy. Sí, intentan sin éxito encubrirse a sí mismos y sus acciones en el lenguaje de la libertad y la privacidad, pero en realidad, no defienden más que su propia celebridad. Su guía moral es inexistente".
El día de ayer, Ola Bini, fue declarado inocente en lo que representa un gran revés para la Fiscalía que presentó 60 elementos probatorios al parecer sin el peso suficiente para convencer a los jueces. Rafael Correa y Leonidas Iza fueron los primeros líderes políticos en “solidarizarse” con Bini a través de redes sociales:
Como parte de una instrucción fiscal por el delito de fraude procesal, la Fiscalía, con el apoyo de agentes policiales,
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