Fieles que conmemoraron el Miércoles de Ceniza pidieron por la La Paz mundial

Cientos de personas acudieron la mañana de este miércoles, 2 de marzo del 2022, a la iglesia de San Francisco para recibir la ceniza. Desde las 06:00, ellos se congregaron en ese templo religioso para seguir la misa que estuvo a cargo del padre Víctor Hugo González.

“Esto es muy hermoso porque los fieles han venido”, manifestó el sacerdote. El año pasado, la tradicional ceremonia católica se modificó por la emergencia sanitaria del covid-19. Por primera vez en la historia, la cruz de ceniza no se colocó de forma individualizada en la frente de los fieles, tampoco se pronunció la frase: “Acuérdate de que eres polvo y al polvo volverás” a quienes acudieron al templo.

Al final de cada ceremonia, el sacerdote pronunció esa frase para todos los asistentes. Se limpió las manos y se puso la mascarilla para proteger la nariz y la boca. Los feligreses se acercaron en orden y guardando distancia. Tomó la ceniza y la dejó caer sobre la cabeza de cada uno.

En este año, el sacerdote también utilizó la mascarilla, pero marcó la cruz en la frente de quienes acudieron a las ceremonias religiosas como se lo realiza tradicionalmente. “La ceniza fue elaborada con los ramos del año anterior que se secan y ciernen. Se la mezcla con un poco de agua bendita (…) También preparamos los libros litúrgicos. Cambiamos los ornamentos, antes estábamos con el verde de los caminantes y ahora tenemos el lila de la “poca de reflexión”, manifestó González.

La gente pidió por la paz mundial y el fin de la guerra en Ucrania. “Queremos que se acaben las hostilidades y que vuelvan a abrirse fuentes de trabajo para todos”, manifestó Clementina Vacacela.

Para Jaime Briceño, la tranquilidad en Rusia y Ucrania es fundamental por el bien de la humanidad. Inés Inga y Rosa Proaño pidieron a las autoridades del mundo que se abra el diálogo para lograr la paz en el planeta.

Paulina Díaz pidió a Dios que la gente consiga empleo y pueda salir de la crisis. También que cese la pandemia del covid-19 a escala global. Guiso Encalada lloraba por la muerte de su esposa. “Me siento mal y confío que el Señor me dé la fuerza para salir adelante”