El sector exportador teme por los efectos del alza de costos
Estados Unidos, China, Rusia, Colombia y España son los principales destinos de las exportaciones no petroleras durante este año. De estos mercados, solo el segundo tuvo una ligera caída del -0,2% con respecto al año anterior, por la caída de los envíos bananeros.
España y Estados Unidos, por su parte, registraron los mayores aumentos este año con el 31,6% y 16,8%, respectivamente, según el último informe presentado este mes por el Ministerio de Producción y Comercio Exterior.
En el mercado estadounidense hubo un incremento importante del 65,3% de las exportaciones camaroneras. Un comportamiento similar tuvo este rubro en los países de la Unión Europea, con un crecimiento del 31,3%.
Entre enero y octubre pasado, Ecuador vendió al mundo USD 14 068 millones en bienes no petroleros, lo que significó un aumento de USD 1 808 millones (14,7%) con relación al mismo período del 2020, de acuerdo con el Ministerio de Producción.
Los cinco principales productos de exportación no petrolera entre enero y octubre pasados fueron camarón, banano, enlatados de pescado, flores naturales y cacao. A excepción del banano, el resto tuvo incrementos.
El presidente de Fedexpor, Felipe Ribadeneira, dijo que las condiciones de competencia en el comercio internacional, derivadas de la reactivación económica, provocaron una crisis logística mundial, que pone en serio riesgo la sostenibilidad de las exportaciones no petroleras por los excesivos aumentos en las tarifas de transporte marítimo.
Además, hay una menor oferta de cupos y rutas navieras para el volumen de carga mundial que requiere toda la oferta exportable.
Según él, el efecto de esta situación se refleja en alzas que superan el 80% en el valor de los insumos básicos que emplea la cadena de exportación como papel, cartón, vidrio, y latón. “Es el resultado de una menor disponibilidad global y que encarecen todo el proceso productivo”.
El dirigente indicó -en un comunicado gremial- que si bien el problema tiene un impacto generalizado, los principales países competidores en la región aplican mecanismos flexibles de amortiguamiento de esos efectos. Entre otros, mencionó a la devolución de tributos para exportadores, financiamiento en condiciones preferenciales, y depreciación cambiaria.
En el caso ecuatoriano, dijo que la situación se complica por el incremento salarial, mayor carga impositiva por contribuciones únicas y temporales, así como las alzas en el cobro de gastos locales del transporte naviero que, en algunos rubros, superarán un 50% adicional el siguiente año con respecto al 2021.
“Se consiguió que se incorpore en nuestra legislación la Devolución Simplificada Unificada de tributos a las exportaciones, vigente desde diciembre del 2019, pero hasta ahora el Gobierno no logra aplicar”, añadió.
Otro mecanismo importante de inmediata aplicación, agregó, debe ser la eliminación del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) para los fletes navieros y aéreos