El 30% de los fondos para repavimentar fue utilizado
El estado de las calles en Quito es una preocupación para los conductores. Según el alcalde Santiago Guarderas, el 80% de vías requiere una intervención urgente. Para 2022 se prevé intervenir 90 km.
El avance en la intervención de vías en la capital no es alentador. Según la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas(Epmmop), este año fiscal solo se ejecutó el 30% del presupuesto asignado a esos fines.
Otro dato importante: según el Municipio, entre calles secundarias, vías pavimentadas, parroquiales rurales e incluso vías que fueron repavimentadas en los últimos años se presentan fisuras, por lo que requieren mantenimiento preventivo y correctivo.
Edison Jiménez es taxista. Por su trabajo recorre a diario varias calles de la ciudad. Sin embargo, su casa está en La Kennedy, en el norte de Quito. Cuenta que desde hace años espera la rehabilitación integral de la Galo Plaza Lasso.
“Hay montículos por los bacheos. Es una vía muy irregular, sobre todo en el carril central. Hace rato debían haberla rehabilitado por completo”.
En El Recreo, en el sur, hay una situación parecida. En las calles Miguel Carrión y El Tambo es evidente el deterioro de la calzada. Grandes huecos se han formado en media vía y los conductores no tienen otra opción que sortearlos para evitar daños a sus vehículos.
Según la Epmmop, la situación actual de las calles tiene que ver con una falta de planificación en la rehabilitación vial durante los últimos 15 años.
Verónica Miranda, expresidenta del Colegio de Ingenieros Civiles de Pichincha, consideró que hay dos puntos claves para trabajar. El primero es contar con una planificación que no solo incluya la pavimentación sino también el mantenimiento.
Un tema importante es contar con estudios sobre la carga que tendrá la calzada, el tipo de uso (vía principal o secundaria) y la cantidad de vehículos que circularán.
El otro elemento es, con base en la información sobre cada calle, establecer el material que se requiere para que se garantice su durabilidad. A criterio de Miranda, en Quito existe un importante número de calles que deben ser intervenidas en su estructura, ya no solo en el arreglo de fisuras.
En este último año, el Municipio intervino 23 kilómetros. En eso ha invertido USD 3,9 millones.
Algunas de las vías rehabilitadas fueron la av. Ilaló, la Luis Pallares en Yaruquí, av. Quitumbe Ñan, N85 de La Roldós, Intercambiador de Guajaló, Orellana, El Guambra y la av. Pérez Guerrero.
En lo que tiene que ver con el bacheo, entre enero y noviembre de 2021 el Municipio trabajó en la reparación de 132 350 baches, 1 040 zanjas y 12 989 metros cuadrados de vías. Invirtió USD 2,5 millones.
Este tema, criticado fuertemente durante la administración del exalcalde Jorge Yunda, está entre las prioridades de la nueva administración.
Santiago Guarderas se refirió a esta necesidad durante su discurso en la Sesión Solemne del 6 de diciembre pasado.
Según Nadia Ruiz, secretaria de Planificación del Municipio, entre las prioridades del siguiente año están las obras de la Epmmop que requieren financiamiento.
Además, el Alcalde anunció que para el próximo año se trabajará en la rehabilitación de 90 kilómetros de vías. Según la Epmmop, hay nueve paquetes de vías que deben ser mejoradas y que suman 80 kilómetros, ya planificados.
De esos, cinco están listos para subir al portal del Servicio Nacional de Compras Públicas (Sercop). “Los tiempos de adjudicación e inicio de trabajos dependerá del trámite en la Contraloría General y el Sercop”, dijo la entidad municipal en una respuesta escrita.
Estos cinco primeros paquetes suman cerca de 40 vías que se intervendrán y 45 km que se rehabilitarán, con un presupuesto de USD 15 millones.
Sin embargo, el mal estado de las calles no es el único problema del Municipio. La Epmmop trabaja con el 60% de su maquinaria para la intervención vial. Para 2022 se incluyó en el presupuesto municipal un monto para recuperar la maquinaria.
La Alcaldía intervendrá las vías en pleno invierno. Para eso, según la Epmmop, se trabajará en “sectores donde no se presenten lluvias o se planificarán intervenciones durante la noche”. Esto porque el agua afecta al pavimento.